Auténtica niña prodigio, a los siete años ya brindaba conciertos en grandes teatros de Buenos Aires, la ciudad donde nació el 5 de junio de 1941. Desde entonces Argerich deslumbró en escenarios de todo el planeta como una de las mayores pianistas de su generación. Una artista sensible, frágil, insatisfecha. La pasión por Schumann y Chopin. El universo familiar, la vida. La música, que trasciende las palabras.